Decenas de presos de ETA están firmando una carta de adhesión al manifiesto que en agosto de 2005 rubricaron los ex jefes de ETA Pakito y Makario, en contra de la lucha armada. En él los ex jefes de ETA contaban que "la estrategia político militar de ETA ha sido superada por la represión del enemigo" contra la banda armada. La iniciativa parte de la cárcel de Córdoba donde actualmente se encuentran Rosario Pikabea y Urrusolo Sistiaga, dos ex responsables de la organización, según informó ayer la Cadena SER. Esta nueva iniciativa se une a la que el pasado febrero se promovió desde la cárcel de Logroño. En aquella ocasión los impulsores fueron el ex responsable del aparato político de ETA José Luis Álvarez Santacristina, Txelis, y el ex dirigente del aparato militar de la banda armada Kepa Picabea.
El ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, confirmó ayer que en el seno de la banda terrorista existe un debate "más fuerte que nunca" sobre la continuidad de la violencia porque es el momento en el que está más "aislada", aunque advirtió de que no hay que "magnificarlo" ya que los terroristas "siempre pueden hacer daño".
Por su parte, el coordinador general de Aralar, Patxi Zabaleta, afirmó ayer que los presos de ETA "están abriendo el debate" sobre el fin de la violencia y especificó que sobre este asunto existen "diferentes opiniones y tienen derecho a expresarlas".
