Así lo ha señalado Rajoy durante su intervención en unas jornadas organizadas por 'The Economist', donde ha resaltado la necesidad de ver qué se quiere reformar primero y buscar el momento oportuno para hacerlo.
"No se puede hacer en 24 horas", ha dicho el presidente, para quien es necesario ver "qué se puede hacer" y como se debe hacer porque es importante estudiar bien las cosas antes de hacerlas y ser "consciente de lo que se habla".
De hecho, ha dicho que, en su opinión, es que hay mantener algo "que unió a todos", aunque es "perfectamente mejorable". "En eso estoy trabajando", ha dicho, tras recordar que hay muchas opiniones y muy diferentes, ya que hay quien incluso quiere volver a un sistema centralista. "Lo que une a la gran mayoría es el modelo actual", ha insistido.
UNA REFORMA COMPLEJA
En cualquier caso, ha recordado que una reforma de la Carta Magna exigiría el apoyo de dos tercios de las Cortes, la disolución de las mismas, la convocatoria de elecciones, una nueva aprobación de la reforma por parte del nuevo Parlamento y un referéndum nacional.
"Es un procedimiento complejo", ha explicado el jefe del Ejecutivo, quien ha vuelto a insistir en la necesidad de determinar primeros los objetivos concretos de la reforma y el momento oportuno para llevarla a cabo.