Rusia advirtió ayer a Georgia de que "responderá debidamente" en caso de una nueva agresión militar contra la región separatista de Osetia del Sur, cuya independencia fue reconocida por la capital rusa y cuando se va a cumplir un año de la guerra que enfrentó a ambas naciones.
"Si se produce una nueva agresión, la respuesta será adecuada", aseguró Anatoli Nogovitsin, subjefe del Estado Mayor de las Fuerzas Armadas rusas, en rueda de prensa, según las agencias rusas.
Nogovitsin denunció el suministro encubierto de armamento a Georgia en vísperas del primer aniversario de la breve, pero cruenta guerra ruso-georgiana por el control de Osetia del Sur (12 de agosto de 2008). "El potencial militar de las Fuerzas Armadas georgianas se restablece, pero esto no se realiza como antes, abiertamente , sino de manera encubierta. Esto nos preocupa mucho", afirmó.
El general ruso subrayó que el suministro de armamento pesado y armas a Tiflis prosigue desde hace meses, "aunque según otros esquemas", precisamente cuando la "situación en la zona no se puede considerar, de ninguna manera, tranquila". Nogovitsin aseguró que las tropas georgianas estaban completamente desmoralizadas tras ser derrotadas por Rusia en la guerra de agosto de 2008, pero el apoyo de Occidente permitió que recupere gradualmente su potencial.
En su opinión, Tiflis pretende con sus provocaciones "desestabilizar la situación en las separatistas Osetia del Sur y Abjasia" y "desacreditar el contingente militar ruso" emplazado en ambas regiones. Nogovitsin consideró que Georgia quiere persuadir a la comunidad internacional y a la población local de que las autoridades locales y Rusia "no son capaces de garantizar su seguridad".
Además dos submarinos nucleares rusos, de ataque, patrullaron frente a la costa este de EEUU en una "misión rara" que preocupa al Pentágono. El portavoz del Mando Norte de EEUU, Michael Kucharek, en una declaración escrita reconoció las patrullas e indicó que el Pentágono estuvo vigilando a los dos submarinos rusos.
