Sergio Sánchez vuelve a ser optimista respecto a la posibilidad de volver a jugar al fútbol. La operación de corazón a la que fue sometido la pasada semana ha sido todo un éxito, según le han dicho los médicos. Gracias a ello, el barcelonés podrá hacer una vida normal e incluso seguir ejerciendo su profesión, si bien hay que tener "paciencia", dice el zaguero. Sin duda, una excelente noticia para Sergio Sánchez, para sus allegados y para el sevillismo, que ha seguido muy atento su situación en los últimos meses.
El jugador, que siempre ha querido llevar este asunto con la máxima discreción y evitar comentarios que él mismo consideró precipitados respecto a su futuro, habló ayer por primera vez tras pasar por el quirófano en tierras alemanas. "Es una primera victoria, pero no sólo mía, sino de todos, del club, que me ha apoyado en todo y me ayudó a decidir, porque era una decisión que no debía tomar solo. Entre mi familia, Monchi, el presidente y mis compañeros, gracias a todos ellos y gracias también a mí carácter, decidí afrontar la operación y tener al menos la oportunidad de volver a jugar. De momento parece que vamos ganando 1-0", dijo en la radio del club.
Lo más importante de todo es que esta operación le permitirá llevar a cabo una vida normal, según le han comunicado los médicos que le atienden. "Podré vivir sin problemas. Está confirmado que ha salido todo perfecto. Los primeros pronósticos apuntan a que pueda volver a jugar, pero esto es un proceso largo. Ahora viene lo más duro: trabajar y fortalecer, seguir los pasos de los médicos y tener paciencia... Pero bueno, vamos con esa esperanza y espero que al final todo ese esfuerzo se pueda ver recompensado en el terreno de juego", explica.
MEJOR DE LO ESPERADO. Sergio Sánchez se operó momentos después de conocer el resultado de la final de Copa. "No quería saber nada hasta después de la operación, pero las ganas me pudieron y fue positivo entrar al quirófano sabiendo que el equipo había ganado", confiesa, agradeciendo el trato de los médicos en Hamburgo: "Llegamos al hospital y desde el principio fue muy amable y agradable. Todo era muy sencillo, con mucha naturalidad. Me dijeron que las expectativas eran muy buenas, que no tuviera ningún tipo de miedo".
"Fue despertar y, recuerdo, ver a mi familia y al médico. Pregunté si todo había salido cómo se esperaba y me dijeron que no, que había salido mejor... Explotó un cúmulo de alegrías y llantos al ver que el esfuerzo de ser operado tiene su recompensa", comenta el barcelonés, de nuevo esperanzado ante la posibilidad de volver a jugar al fútbol.
Sergio Sanchez fue operado el pasado jueves por la mañana en tierras alemanas, intervención que corrió a cargo del doctor Sievers. Según el parte ofrecido por los médicos del club de Nervión, ahora hay que estar pendientes de la evolución post-operatoria y de la consiguiente rehabilitación cardiaca.
El pasado 1 de enero, el Sevilla anunció que a Sergio Sánchez se le había detectado una dolencia que aconsejaba la paralización de toda actividad deportiva, a la espera de someterse a una operación para recuperarse de su problema cardíaco.
