Mientras PP y UPN protagonizaban la pelea política tras el rechazo a las enmiendas a la totalidad de los Presupuestos, el vicepresidente segundo del Gobierno, Pedro Solbes, se dedicaba a defender sus cuentas. Solbes se mostró satisfecho con que el proyecto económico para 2009 hayan superado su primer paso parlamentario, aunque advirtió de que ahora se avecina un periodo "complicado y difícil" con el debate de las enmiendas parciales al proyecto de ley.
Previamente, en el hemiciclo, Solbes insistió en defender que los Presupuestos de 2009 son "rigurosos, austeros, solidarios" y "miran al futuro con confianza" y reiteró, a quienes quieren una mayor contención en el gasto, que deberían decir a qué partidas renunciarían para conseguirlo.
Además insistió en que incluyen medidas a corto plazo para ayudar a los ciudadanos más desfavorecidos pero sin olvidar el objetivo a medio y largo plazo de cambiar el modelo de crecimiento económico español. Solbes también reconoció que en un momento como el actual es cierto que los ingresos y gastos calculados para el año que viene "puedan verse cambiados de forma sustancial", aunque insistió en que "hay que lanzarse al agua" y "trabajar con los mejores mimbres de los que se dispone en cada momento".