La mesa de negociación a tres bandas -Gobierno, patronal y sindicatos- abierta para analizar alternativas de contratación, fundamentalmente para el colectivo de jóvenes, sobre los que pesa una tasa del paro del 40%- tendrá que tener los deberes hechos para finales del mes de julio. Es al menos la pretensión del ministro de Trabajo, Valeriano Gómez, que deja claro que el debate no está centrado sobre el modelo de contratación español.
"Los temas a tratar no son sobre contratación con carácter general, sino sobre contratación a tiempo parcial y un modelo que combine formación y empleo para los jóvenes", aseguró Gómez en una entrevista a Europa Press, en la que abundó en que ahora "no es el momento de replantear todo el sistema español de contratación, cuando la economía ni siquiera crece lo suficiente como para crear empleo y saber qué tipo de empleo creamos".
Además, frente a las tesis de los empresarios que quieren simplificar los tipos de contratos, el titular de Trabajo afirmó que "hay muchos, pero solo funcionan cinco". Así, el indefinido de fomento del empleo, el indefinido ordinario, el temporal eventual por circunstancias de producción, el temporal de obra y servicio y el contrato para trabajadores interinos son las "figuras contractuales esenciales, el resto son marginales", sentenció.
Una de las propuestas de la patronal madrileña CEIM es crear un contrato único con una indemnización por despido de 20 días y un tope de una anualidad, algo que la CEOE podría poner sobre la mesa tripartita.
A juicio de Gómez, habrá que esperar "algunas semanas" para alcanzar acuerdos y precisó que "no me gustaría que consumiéramos el mes de julio para hacer esta adaptación de la legislación, en todo caso el Gobierno presentará una propuesta próximamente y la someterá a discusión con los interlocutores sociales". "Me pongo en el terreno del acuerdo. Si no es posible tomaremos decisiones, las comunicaremos y haremos lo más necesario para crear empleo", apuntó para concluir que, a diferencia de la reforma de los convenios, no hay un mandato expreso por ley para que se lleve a cabo la reforma, con lo que el Gobierno no se siente obligado a tomar medidas unilaterales.
Pero para llegar a consensos consideró que el presidente de la CEOE, Juan Rosell, debe "normalizar" la situación en la patronal tras la "discusión interna" surgida en la negociación de los convenios. "Da la impresión de que el terreno que ha perdido el señor Rosell está más bien en la discusión interna de su organización".
"En pleno proceso de negociación CEIM ha dicho que para qué firmar un acuerdo que limite las posibilidades de actuación del futuro Gobierno", aseguró Gómez, que agregó que "es la primera vez que esto ocurre".
"La regulación estará lista en estos días"
La nueva regulación para que las empresas con beneficios que presenten un ERE, como Telefónica, se hagan cargo del coste social "tiene que estar preparada pronto, en los próximos días", aseguró el ministro de Trabajo, Valeriano Gómez.
La nueva legislación se está "ultimando" y establece que las grandes empresas de más de 500 trabajadores y que, pese a haber tenido beneficios en los dos últimos años, realicen un ERE que afecte a trabajadores mayores de 50 años, tendrán que efectuar una aportación económica para compensar el impacto sobre el sistema de protección por desempleo.
