Las declaraciones que el martes se realizaron desde el Ayuntamiento de Sevilla de que "el aire acondicionado quedaba prohibido en los colegios", no han sido bien acogidas por los padres de los alumnos. Tanto la Confederación de Asociaciones de Padres de Alumnos (Codapa) como su Federación en Sevilla, han manifestado su oposición a estas declaraciones.
La Federación de Asociaciones de Madres y Padres de Alumnos (Fapa) Nueva Escuela de Sevilla tildaba de "surrealista" este hecho de prohibición la instalación de equipos de aires acondicionados en los colegios públicos de la capital hispalense por cuestiones de deficiencia energética, abogando en este sentido por compatibilizarlos con recursos más sostenibles. El presidente de esta Federación, José María Mesa, indicó que "para que todos estuvieran a un mismo nivel habría que plantearse quitar el aire acondicionado de todas las dependencias municipales para ahorrar energía". Y es que, a su juicio, en comparación es "más importante que los niños puedan tener esas condiciones".
En el mismo sentido, han ido dirigidas las palabras de la presidenta de la Confederación Andaluza de Asociaciones de Padres de Alumnos, Pilar Triguero, quien aseguró que "antes de empezar por los colegios habría que empezar por otros edificios municipales". Triguero recalcó además que las altas temperaturas que se viven en la ciudad hacen que "en determinados momentos haya que regular la temperatura para que los alumnos estén en condiciones de atender correctamente en clase".
Asimismo, Mesa aseguró comprender lo "fuerte" de la inversión por el aumento del consumo de energía eléctrica, si bien instó a buscar soluciones aludiendo a que "en Sevilla no es ningún lujo tener aire acondicionado, sino una necesidad". El presidente de Fapa recordó que las asociaciones de padres son las que la mayor parte de las veces pagan estas instalaciones, "si bien el problema es que al Ayuntamiento le toca pagar la energía eléctrica que los hace funcionar". Por ello, aseveró que al colectivo que representa le parece "bien" posibles soluciones como las pérgolas vegetales o un mejor aislamiento de los edificios, "pero sin decir que no se debe poner aire acondicionado".
Mesa aportó otra posible solución al exponer que algunos edificios ya cuentan con placas fotovoltaicas, con energía eléctrica que revierte en la red y supone un ahorro, por lo que sugirió "llenar colegios y edificios municipales con estas placas para generar energía limpia que alimente esos aparatos de aire acondicionado".
Por su parte el Consistorio anunció su intención de reunirse con la Delegación Provincial de Educación para exponer los criterios y actuaciones en consecuencia a raíz de una auditoría ecológica realizada sobre cuatro colegios de la capital, que son el Nuevo Tussam, el Pino Flores, Virgen de la Esperanza y San José de Calasanz.
