La Policía francesa desactivó ayer varios paquetes de explosivos localizados en los lavabos de unos conocidos grandes almacenes de la capital gala. Las sospechas recaen sobre un grupo afgano que amenazó al Gobierno de Sarkozy por la presencia de sus tropas en Kabul.
Hasta un total de cinco artefactos fueron encontrados en la tercera planta del edificio sede de los almacenes Au Printemps, situado en el centro de la capital francesa. Hay que destacar el hecho de que ninguno de los artilugios desactivados contaba con el dispositivo necesario para hacerlos estallar. Según la emisora de radio France Info, los agentes franceses establecieron de inmediato un perímetro de seguridad en torno al lugar en el que fueron hallados los explosivos. Asimismo, procedieron a la evacuación de todo el edificio. Los almacenes Au Printemps están situados en el bulevar Haussmann, en el conocido barrio de Ópera de la capital francesa, uno de los más comerciales y turísticos de la ciudad.
Por el momento se desconoce quiénes han sido los autores materiales del intento de atentado, aunque la ministra de Interior francesa, Michèle Alliot-Marie, informó a los medios de comunicación que se trata de una organización denominada Frente Revolucionario Afgano y que es totalmente desconocida para las fuerzas de seguridad del país. El motivo de esta amenaza podría estar relacionado con la presencia de efectivos franceses en Afganistán. La ministra se dirigió de inmediato a la zona en la que tuvieron lugar los hechos para verificar in situ todos los detalles sobre esta amenaza y conocer al completo todo lo acontecido.
La responsable del Ministerio del Interior aseguró que los explosivos encontrados son "relativamente antiguos", contienen dinamita y no cuentan con los detonadores necesarios para que puedan explotar. Es por esta razón por la que aseguró que "no había ningún riesgo de explosión". No obstante, se inició una exhaustiva investigación para averiguar quiénes son los responsables del posible atentado en estos grandes almacenes.
Su departamento confirmó la existencia de una carta de reivindicación del citado grupo afgano, desconocido por el Gobierno francés. A este respecto, Alliot-Marie confirmó el hecho de que la alerta surgió a raíz de recibir una carta en la que el colectivo de Afganistán anunciaba su intención de "pasar a la acción" antes de hoy miércoles 17 de diciembre.
Por su parte, el presidente de Francia, Nicolás Sarkozy, solicitó ayer "vigilancia" y "firmeza" contra el terrorismo. Poco después de que la Policía gala desactivase varios paquetes explosivos en los lavabos de los conocidos grandes almacenes de París, Sarkozy, en una rueda de prensa que ofreció en la sede del Parlamento Europeo en Estrasburgo (Francia), pidió que en todo momento se guardase "prudencia" y "calma" ante el descubrimiento.
Tras los hechos, la ministra anunció ante el Senado el incremento de las medidas de seguridad, y afirmó que las autoridades ordenaron un "refuerzo" de los efectivos en París y en las principales ciudades de Francia.
Lo cierto es que las alarmas saltaron, e incluso el primer ministro francés, François Fillon, aseguró que la "amenaza terrorista contra Francia es fuerte", aunque advirtió que las autoridades "no cederán" a ella. Fillon dijo que la amenaza es elevada porque Francia es "un país comprometido en la defensa de la libertad en el mundo" y tiene fuerzas "comprometidas en varios territorios donde precisamente luchamos contra las organizaciones terroristas".
