Un quiosco de prensa se ha hundido en un socavón que se ha abierto en las obras del metro de Sevilla en la Puerta de Jerez. Los bomberos y la Policía Local han tenido que establecer un amplio dispositivo de seguridad y cortar el tráfico en la zona, así como el acceso al aparcamiento subterráneo situado inmediatamente debajo de donde se ha producido el socavón.
El punto del hundimiento es una franja de apenas cuatro metros de ancho por la que transitan miles de personas diariamente, ya que debido a las obras de la futura estación de metro de Puerta de Jerez esa es la única vía de acceso a la avenida de la Constitución y la calle San Fernando, en pleno centro de Sevilla.
El socavón se ha abierto en la Puerta de Jerez esquina con la calle Almirante Lobo y el quiosco de prensa ha desaparecido de la superficie de la acera, en un siniestro que no ha causado ningún daño personal. El quiosco de prensa ha desaparecido totalmente de la acera, en un socavón que según los bomberos tiene unos ocho metros de profundidad.
El dueño y su familia, ilesos
El dueño del quiosco afectado, Juan Ariza, ha relatado que tras sentir un primer movimiento de la tierra dio un salto fuera e inmediatamente después, al percatarse de que se iba a hundir, consiguió sacar "de un tirón" a su esposa e hija de seis años, que continuaban en el interior.
La esposa, tras un primer momento en el que estuvo relatando tranquilamente el incidente a los periodistas, sufrió un ataque de ansiedad y tuvo que ser atendida en una ambulancia de los bomberos.
Preocupación en la Asociación de Vecinos
Por su parte, el presidente de la Asociación de Vecinos ha expresado su temor a que el incidente pueda repetirse en las numerosas viviendas cercanas y en un punto de tránsito de miles de personas.
Pablo Barbecho, presidente de la Asociación de Vecinos Casa de la Moneda, ha dicho a los periodistas que el lugar del siniestro "es un sitio de paso permanente de peatones", por lo que ha considerado "un milagro" que el hundimiento de la acera no haya provocado ninguna desgracia personal. "Estamos muy preocupados por lo que ha pasado y por el riesgo de que se pueda volver a producir en el futuro", ha dicho en el lugar del hundimiento.
Según Barbecho, hasta ahora los detectores colocados por el personal del metro solo habían captado pequeños desplazamientos de un centímetro en la zona.
Barbecho ha precisado que el sitio del hundimiento está fuera del muro-pantalla que delimita el túnel del metro y también fuera de la zona de vehículos del aparcamiento situado inmediatamente por debajo.
El presidente de los vecinos ha expresado que no duda de la profesionalidad de los responsables del metro y de que aplazarán la inauguración de la línea 1, prevista para el próximo 21 de diciembre, en caso de necesidad.
