Salud ha dado un parón a la reforma sanitaria que tenía previsto realizar en Sevilla a partir del 1 de enero. El pasado mes de junio, la administración sanitaria anunció que 70.000 sevillanos cambiarían de centro de salud debido al cierre de los ambulatorios de Marqués de Paradas -que Salud tiene en régimen de alquiler- y El Pumarejo y la apertura de dos centros nuevos: en el Alamillo (Nuevo Torneo) y en la calle San Luis. Esta remodelación iba a incluir también, se dijo, una redistribución de la población asignada al ambulatorio de La Campana. Las quejas vecinales y sindicales no han cesado en estos meses y Salud ha echado el freno: Marqués de Paradas continuará un año más, al menos, funcionando tal cual está en régimen de alquiler, y el cierre de San Luis y el Pumarejo no se producirá, según fuentes de Salud, "hasta antes del verano, puede que marzo o abril", fecha hasta la que la administración sanitaria andaluza ha pospuesto la apertura de los dos nuevos ambulatorios.
La clave ha estado en el centro de Salud de Marqués de Paradas. A primeros de diciembre, el director gerente del Distrito Sanitario Sevilla, José Manuel Galiana, planteó a los vecinos del entorno del ambulatorio que éste iba a seguir funcionando bajo ese régimen un año más. Salud ha tenido, para ello, que negociar con los propietarios del inmueble puesto que una sentencia les daba la razón y les permitía a estos que Salud abandonara el recinto el próximo 1 de enero. De ahí que la administración anunciara, en un principio, esa fecha como inicio de toda la reordenación sanitaria en el centro.
Esta polémica fue una réplica de la que, meses antes, se había vivido en torno al ambulatorio de La Campana. Salud también anunció entonces la posibilidad de adquirir un nuevo edificio para trasladar el centro de salud puesto que la intención de la Consejería es desprenderse de todos los alquileres que están actualmente en vigor a cambio de edificios propios. Finalmente, una renegociación con los propietarios del inmueble provocó un acuerdo que evitó los cambios el centro de La Campana.
Respecto al ambulatorio de Marqués de Paradas, Galiana se ha comprometido con los residentes a que, llegado el caso de proceder a la reorganización, "ésta será siempre en la zona", desterrando el temor vecinal a tener que ir a centros médicos más lejanos para su atención médica.
Según fuentes consultadas, Salud baraja la opción de adquirir o obtener la cesión del inmueble del Arenal, propiedad del Ayuntamiento de Sevilla y que éste no ha podido darle salida en una operación de venta. De este modo, podría realojar en un futuro a los usuarios pertenecientes al ambulatorio de Marqués de Parada en ese centro cercano.
Amenaza de protestas. El conflicto vecinal por la situación en Marqués de Paradas había llegado hasta el punto de que se había convocado una movilización por varias asociaciones de vecinos del centro histórico de Sevilla (incluyendo las que tienen ámbito de influencia en el Arenal, Pumarejo, Plaza de Armas, Santa Cruz o la Plaza del Salvador, entre otras) mediante la cual se iba a cortar el tráfico en la avenida de Reyes Católicos el 10 de diciembre, una protesta que, finalmente, quedó suspendida.
Respecto a la situación sanitaria que se abre en la ciudad a partir del año que viene, fuentes de Salud destacan que durante 2010 habrá un centro de salud más, una vez que abran sus puertas San Luis y Alamillo y permanezca abierto el de Marqués de Paradas.
La puesta en marcha de los dos nuevos ambulatorios de atención primaria ha supuesto una inversión en obras y equipamiento por parte de la Consejería de Salud de 7,5 millones de euros. La Junta destaca de estos centros que son mucho más accesibles para los ciudadanos "tanto si van andando como si acuden a ellos en vehículos".
