Hace 18 años la ONU aprobaba por primera vez una Convención de Derechos del Niño, que España ratificaba un año después, en 1990. Los cambios legislativos que desde entonces se han acometido han hecho que España sea el quinto país desarrollado con mayor índice de bienestar infantil.
España es el quinto país que forma parte de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) con un mayor índice de bienestar infantil, según el estudio de Unicef Un panorama del bienestar infantil en los países ricos. La posición de España en esta lista es positiva, pero hay que "consolidar lo que está bien y reforzar las políticas de lo que no lo está", recalca Marta Santos, directora del Centro de Investigación Innocenti de Unicef. Uno de los mejores resultados es el relativo a la salud y a la seguridad.
Entre los índices del estudio, destacan aspectos tan curiosos como que los menores españoles están por encima de la media a la hora de comer en familia o de usar el preservativo en sus primeras relaciones. Sin embargo los peores datos corresponden a la percepción del bienestar material y educativo de los menores.
Santos destacó la importancia de impulsar un "apoyo sistemático de las familias con bajos ingresos, monoparentales y numerosas y todas aquellas que estén en situación de vulnerabilidad" para ayudar al desarrollo favorable de la infancia. Además, pidió también ayudas específicas a los niños para que puedan "desplegar toda su potencialidad".
Pobreza
Y es que, pese a que la situación es buena, los riesgos están latentes, como demuestra que, según Unicef, en España uno de cada cuatro niños está en situación de riesgo de pobreza. "Los niños siguen siendo en España el grupo de población más vulnerable a la violencia y la pobreza", asegura la organización, que aporta datos contundentes: en 2005, cerca de 3.000 menores de 14 años (2.960) fueron víctimas de maltrato en el seno familiar, mientras que 14.496 niños viven en centros de protección.
El Comité de Derechos del Niño de la ONU ha mostrado su preocupación por casos de menores extranjeros no acompañados, explotación sexual de niños, violencia contra y entre menores y adicciones, entre otros.
En el lado bueno de la balanza, la protección infantil frente a contenidos nocivos de televisión, internet y videojuegos está dando resultados "positivos". Asimismo, España se encuentra entre los países con tasas más bajas de mortalidad infantil de menores de cinco años, según datos de Unicef. La organización también apunta datos positivos en cuanto a la esperanza de vida al nacer, que es una de las más elevadas del mundo (80 años), así como en los niveles de escolarización en primaria y secundaria, que es prácticamente del 100%.
Pese a los datos alentadores de España, la situación en el mundo sigue siendo dramática. Unicef señala que los índices de mortalidad infantil "se han reducido considerablemente en las dos décadas pasadas", ya que mientras en 1990 murieron 13 millones de niños con menos de cinco años, en 2006, la cifra no llegó a los diez millones, un "importante éxito" pero "un número inaceptable".
