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La Virgen de la Cabeza, en la Avenida, entre numeroso público. / Inma Flores
Con las historias del pregón novelado de Antonio García aún flotando en la Catedral, la Virgen de la Cabeza ha regresado este sábado a casa precedida por una colorida comitiva de estandartes y banderas de la hermandad Matriz de Andújar, así como de numerosas filiales que participaron en esta procesión extraordinaria en la que las hermanas lucieron mantillas blancas. Sorprendió que la imagen portara la corona de oro de la Morenita de Andújar, un regalo del santuario a los devotos sevillanos que sirvió para unir aún más ambas ciudades. En el camino a San Juan de la Palma, visitó a las autoridades en el Ayuntamiento, la capilla de los Panaderos, la parroquia de San Andrés, la Divina Pastora... y Monte-Sión como novedad de última hora.
Y es que los hermanos de la Cabeza modificaron levemente el itinerario, dejando de pasar ante la iglesia de San Martín. Al parecer, la hermandad de la Lanzada, con sede en este templo, le comunicó la noche antes que no tenía «disponibilidad» para abrir las puertas y recibir al cortejo. ¿Efectos colaterales del puente festivo?