Cultura

Compán: «La novela es un mihura que siempre está a mi lado»

Narrador de contrastada trayectoria, Salvador Compán (Úbeda, 1949) ha publicado recientemente el ensayo Jaén, la frontera insomne(Fundación Lara) y un libro de relatos, Cuídate de los poemas de amor (Almuzara), que presentará esta tarde, a las 20.00 horas, en la librería Beta de la calle Sierpres.

el 14 sep 2009 / 21:43 h.

Narrador de contrastada trayectoria, Salvador Compán (Úbeda, 1949) ha publicado recientemente el ensayo Jaén, la frontera insomne(Fundación Lara) y un libro de relatos, Cuídate de los poemas de amor (Almuzara), que presentará esta tarde, a las 20.00 horas, en la librería Beta de la calle Sierpres.

Las historias recogidas en este volumen pertenecen a épocas y motivaciones muy distintas, pero el autor las reúne alrededor de un hilo común: "El deseo está en todos ellos", comenta el escritor. "Son relatos que he ido escribiendo a lo largo de toda mi vida, catorce momentos que me abrieron los ojos y que sabía que, tarde o temprano, acabaría escribiendo".

Parejas mal avenidas, estudiantes a los que el amor pilla desprevenidos, ancianas insensatas, de todo hay en este conjunto de narraciones para las cuales Compán no baja los niveles de exigencia que acostumbran a tener sus novelas, como Tras la mirada, Un trozo de jardín, Madrugada o Cuaderno de viaje, que fue premio Planeta en 2000. "El relato impone un registro completamente distinto, a menudo se basa más en omisiones y sugerencias que en lo que cuentas. Todo tiene que ir como un trallazo directo al lectot, desde la primera hasta la última línea", asegura.

"El mimo que pones en el relato tiene que ser aún mayor que en la novela, debido a su concentación. Pero creo que la literatura tiene que buscar siempre la exactitud de la palabra. No hay literatura si la idea no profundiza: lo demás serán, como mucho, sus aledaños".

Convencido de que el relato corto vive en España un buen momento, el escritor comparte una opinión muy popular: "Vivimos en la sociedad de lo urgente, y en ella creo que encaja muy bien la piedra pulida del relato, mientras llega el autobús o en un trayecto corto camino de casa o del trabajo", explica.

Y aunque Compán vuelve a dejar alto el pabellón en este Cuídate de los poemas de amor, nadie duda de que el novelista que lleva dentro sigue vivo y no tardará en volver a revelarse: "la novela es un toro de mihura que siempre está a mi lado", sentencia el autor.

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