Cultura

Fundación Cansinos Assens se traslada a Madrid por "el incumplimiento del anterior gobierno municipal"

Además, el actual Ayuntamiento reducirá en un 75% su subvención, que pasará de 90.000 euros anuales a un máximo de 25.000 euros.

el 05 sep 2011 / 15:50 h.

El presunto cerebro de Malaya, Juan Antonio Roca, durante el juicio.

Los temores se confirmaron: la Fundación-Archivo Rafael Cansinos Assens hará las maletas y se trasladará a Madrid debido a los recortes presupuestarios del Ayuntamiento de Sevilla. Se trunca así uno de los proyectos más ilusionantes del ámbito literario sevillano de los últimos años, con el que se pretendía hacer justicia a la figura y la obra del polígrafo sevillano Rafael Cansinos Assens (1882-1964).


Si El Correo advertía hace una semana de la parálisis en la que se hallaba esta fundación debido a los pagos pendientes del anterior gobierno municipal –que ascenderán a unos 120.000 euros a finales de año–, la gota que ha colmado el vaso ha sido el recorte anunciado por la nueva delegada de Cultura, María del Mar Sánchez Estrella, que reduciría la dotación del consistorio de los 90.000 euros anuales comprometidos inicialmente a 25.000, un 75 % menos, y únicamente para actividades. Y eso, si la Delegación de Hacienda no echa para atrás esa cifra en los presupuestos que debe aprobar este mes.


“La situación estaba llegando al extremo de poner en peligro los pagos a la Seguridad Social, por lo que he preferido cortar por lo sano y despedirme como gerente”, afirma Rafael Cansinos, hijo de Cansinos Assens e impulsor de la fundación. “Lo que no cambia es que no me apeo de este proyecto, al que he dedicado mi vida. Seguiremos buscando apoyos y la fundación seguirá como antes de venir a Sevilla. Saldrá adelante de todos modos”, agrega.


Otro factor adverso con el que la Fundación ha tenido que lidiar es el hecho de que las obras de acondicionamiento del Convento de Santa Clara, que habría de funcionar como sede de la institución, sigan paralizadas, lo que ha impedido hasta ahora el traslado del rico archivo de Cansinos Assens –especialmente en lo que se refiere a manuscritos y a su epistolario– a la capital hispalense. La puntilla de toda esta situación ha sido la obligada renuncia a dos subvenciones del Ministerio de Cultura que ya estaban aprobadas y sólo pendientes de concretar la cifra, de 8.000 a 10.000 euros. “La ayuda estaba concedida, pero al no tener la Fundación en marcha no podemos cumplir con uno de los requisitos, que es poner el archivo al alcance de los investigadores y de los ciudadanos en general”, agrega Cansinos hijo.


Tampoco ha podido el heredero del escritor ver cumplido su anhelo de obtener para el archivo la declaración de Bien de Interés Cultural (BIC), que garantizaría su conservación y abriría un nuevo horizonte para el proyecto. “El anterior gobierno municipal invitó a la Junta a participar en el Patronato de la Fundación, pero hasta ahora no hemos tenido noticias. Nos insistieron en que cuando el archivo estuviera en Sevilla todo se iría viendo, pero es obvio que no están por la labor de apoyar a la Fundación. Ahora descarto que se pueda lograr la declaración de BIC”, añade.


Un cúmulo de circunstancias que Cansinos hijo define como “decepcionante” y “frustrante”. Asegura haberse reunido varias veces con la nueva delegada de Cultura, incluso en compañía del presidente de la Fundación, Juan Manuel Bonet. “Se ha mostrado muy simpática, pero me ha asegurado que no hay nada que hacer”, comenta. “Puedo comprender que la situación económica no es la más oportuna, y que tener el apoyo del Ayuntamiento, aunque sea de 25.000 euros... ¡Menos da una piedra! Pero todo eso está muy lejos de los objetivos que nos fijamos”, apostilla Cansinos.

 Consituida oficialmente el pasado 22 de marzo de 2010, y presentada por la exdelegada Maribel Montaño como una “deuda saldada” con el escritor sevillano, la Fundación Cansinos contó con el respaldo del PP en la oposición, que dio su voto favorable a la dotación presupuestaria propuesta por el PSOE. La misma que ahora, desde el poder, reduce drásticamente.

 

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