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Un thriller cómico y procrastinado vigente desde el confinamiento

La Estación de las Letras de La Rinconada presentó este martes ‘La joya de Laura’, la primera novela de Raúl León que el presidente de la Junta de Andalucía ha recomendado leer

30 mar 2022 / 08:24 h - Actualizado: 30 mar 2022 / 08:28 h.
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  • Raúl León Moresco, autor de ‘La joya de Laura’ (Foto: Francisco J. Domínguez)
    Raúl León Moresco, autor de ‘La joya de Laura’ (Foto: Francisco J. Domínguez)

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Han sido 11 los años que Raúl León Moresco ha tardado en culminar su primera novela. Un thriller que pretendía ser oscuro y sórdido, pero al que puso el punto y final tras casi 400 páginas trufadas de humor. Una mezcla satisfactoria avalada por las recomendaciones que de su lectura han hecho tanto el presidente de la Junta de Andalucía como Arturo Pérez Reverte. Una joya pulida durante el confinamiento y que mostró todo su brillo en La Estación de las Letras de La Rinconada.

‘La joya de Laura’ es la presentación como escritor de León. Una historia de perdedores, enfocada en Romo, un anodino funcionario que, en el momento del ascenso esperado toda su vida, recibe la noticia del secuestro de su hija. Personajes patéticos, los hechos que les pasan y cómo se transforman desde una mirada cómica recorren esta novela. Una combinación singular que ya va por la segunda edición poco más de un año después de su lanzamiento.

Iniciada en 2009, retomó y concluyó la novela en el confinamiento

Pero antes de ver la luz, en diciembre de 2020, esta ópera prima se remonta en el tiempo. Tanto a la infancia del escritor, cuando ya sentía ese “gusanillo” por escribir, como al año 2009, cuando comenzó a plasmarla en el papel. Por circunstancias de la vida, quedó guardada en un cajón esperando “un momento mejor”.

Un thriller cómico y procrastinado vigente desde el confinamiento
El autor fue entrevistaron por el también escritor Juan Ramón Escobar (Foto: Francisco J. Domínguez)

Para ello tuvo sobrevenir una pandemia. “A algunos les dio por hacer pan, y a mí por escribir el libro”. En el confinamiento abrió el cajón, y a pesar de ser procrastinador – “una manera fina de decir un vago redomado” – sacó aquella introducción escrita hacía 11 años y se marcó escribir 5.000 palabras a la semana para completarla, porque “sabía que iba a acabar el confinamiento e iba a volver al cajón” de no ponerle un final.

Divertir para que la gente desconecte

Su fin al escribirla era “divertir y que la gente desconectara y no pensara en todo lo que estaba pasando”. Ante una realidad cruda y obstinada en las malas noticias, el objetivo “sigue estando vigente con las cosas que dos años después siguen sucediendo”. Y aunque el esbozo inicial era de una novela de suspense con algún pasaje cómico, acabó repleta de humor. Algo que le ha dado ser de donde es, asegura. Nacido en El Puerto de Santa María y afincado en Sevilla, le debe al sur “todo”. “En un primer momento intenté escribir algo serio, de intriga, y al final sale esa vis cómica que convierte algo que, aunque es un thriller, tiene muchos puntos de humor y comedia, y eso lo da la tierra”.

Esa personalidad brota también en los personajes, donde “todos tienen algo mío y algo de gente que conozco”, si bien “no soy Romo al 100% porque es demasiado perdedor”. Como brota en las anécdotas divertidas que pueblan la obra, “la mayoría inventadas. Las que son reales no se pueden decir porque no han prescrito”, aseguró entre risas.

Un thriller cómico y procrastinado vigente desde el confinamiento
Raúl León explicó la creación de la novela, que inició en 2009 y concluyó en 2020 (Foto: Francisco J. Domínguez)

Juanma Moreno y Pérez Reverte han leído la novela

Anecdótico fue también el encuentro con el presidente de la Junta de Andalucía, Juanma Moreno, al que se acercó con intención de regalarle el libro para hacerse una foto con él. Pero cual sería su sorpresa cuando posteriormente, siendo entrevistado por Jesús Vigorra en Canal Sur Radio por el Día del Libro, Moreno explicó que estaba leyendo “un premio de Fernando Lara y otro de un chaval que me lo regaló, que me estoy leyendo y me gusta muchísimo, y se llama ‘La joya de Laura’”.

La mención resultó ser un “empujón”, tan necesario para los escritores noveles “y me abrió alguna puerta”. Porque para hacer camino en las letras hay que “tirarse de la moto”. Por eso no dudó en escribirle a Arturo Pérez Reverte para hacer un trato y que se leyera su novela, cosa que aceptó, asegurando también que le había gustado.

Un thriller cómico y procrastinado vigente desde el confinamiento
Autor y entrevistador comentaron anécdotas y curiosidades en torno a ‘La joya de Laura’ (Foto: Francisco J. Domínguez)

‘La joya de Laura’ tiene su banda sonora

Junto con el humor, la música toma parte en su libro. Como a una película, que “con una buena banda sonora mejora muchísimo”, le ha creado la suya. Y esas canciones que el protagonista graba a su hija en una cinta de casete son las que también se reproducen en los distintos capítulos y en una lista de Spotify que lleva el título del libro y que pone sintonía a la lectura.

La novela fue presentada en el primero de los actos – tras el pregón inaugural de Víctor del Árbol – de La Estación de las Letras. Un gran contenedor de la literatura en todos sus expresiones que supone la evolución de la feria del libro para pasar de ser un evento expositor a convertirse en tres meses de siembra de letras para engrosar y crear nuevos públicos lectores en la localidad, apoyándose para ello en los espacios culturales del municipio, así como en autores y creadores locales, provinciales, autonómicos, tanto que arrancan sus carreras como los que ya son literatos consagrados con reconocimiento nacional e internacional.

El autor, que fue entrevistado por el escritor Juan Ramón Escobar – quien también presentó su primera novela en la pasada edición de La Estación de las Letras – avanzó que ya se ha embarcado en su segundo proyecto. Y aunque está “aún muy verde”, seguirá la misma línea que ‘La joya de Laura’. Si bien no continuará la historia, porque “es autoconclusiva”, no descarta recuperar alguno de los personajes. Lo que si tiene claro es que tendrá que perfeccionar su método procrastinador, pues espera “no tardar 11 años y que nos vuelvan a confinar para escribirla”.